domingo, 16 de diciembre de 2012


CUENTO DE LA GATA

En un pueblecito cerca de H... (Huete), que se llamaba C… (Cañaveruelas - Waves in the Sea of Cane), vivía un niño pequeñito en una plaza en el centro del pueblo que se llamaba el C… (El Coso)
En el Coso había una casa donde vivía el niño pequeñito con su familia: su papá, su mamá y sus seis hermanitos, tres hermanitos y tres hermanitas.
En la misma casa también vivían otros animales. En una cuadra vivía la jica, una borrica muy buena, muy fuerte y muy trabajadora; y en otra cuadra dos cabras que daban leche para el desayuno de todos los hermanitos. 
Al niño le encantaba la borrica, tanto le gustaba la jica que una de las primeras palabras que aprendió a decir era jica, jica.
Igualmente, en la casa había una gata que se llamaba la Gata y se encargaba de que no hubiera demasiados ratones, porque se podrían comer la comida de la despensa. La gata era un animal muy juguetón, siempre que pasaba al lado del niño le empujaba con su tripa y le tiraba al suelo.
Además, la casa tenía un corral en la parte de atrás donde había un pequeño gallinero para las gallinas, que entre otras cosas ponían huevos, y los huevos fritos estaban muy buenos. Justo debajo del gallinero estaba la pocilga, una habitación muy, muy pequeña donde vivía un cerdito que estaba muy gordito.
El niño pequeño tenía menos de dos años, agarrándose con las manos a la mesa de la cocina, donde comían y cenaban, y poniéndose de puntillas no llegaba a ver lo que había encima de la mesa; al niño no le gustaba no saber lo que había allí y que todos los demás si lo supieran.
El niño estaba muy contento de vivir en la casa del Coso con su familia y tantos animales, pensaba que era una gran suerte haber nacido humano en lugar de borrica, gata, cabra, gallina, cerdo, ratoncito o, ¿por qué no? hormiga.

No se hacía daño al caer al suelo, pero aunque al principio pensaba que eran pequeños accidentes, luego se dio cuenta de que, más que accidentes, era un poco como si la gata dijera yo soy más fuerte y aquí mando yo.Tenía ganas de saber lo que había encima de la mesa sin necesidad de que alguien le cogiese en brazos; de poder coger la jarra de agua sin tener que esperar a que se la dieran cuando tenía sed; y tenía ganas de poder evitar que la gata, rozándole con su tripa al pasar a su lado, acabara siempre tirándolo al suelo.
Otra cosa que le gustaba mucho era mirar la lumbre. En el suelo de la cocina había una base de metal pegada a la pared, justo debajo de la chimenea, donde su mamá cocinaba la comida en sartenes y pucheros con el calor del fuego de leña. Los continuos cambios de forma y color de las llamas y las ascuas eran fascinantes y trozos enormes de madera acaban reducidos a pequeños montoncitos de cenizas.
El niño era muy feliz, y todos eran muy buenos, su papá, su mamá y sus seis hermanitos. Con tantos hermanitos estaba siempre jugando. Cuando alguna persona le preguntaba a quién quería más, a la jica o a su papá, siempre contestaba que a la jica, porque pensaba que la jica necesitaba más amor y que estaba más sola.
Cada día que pasaba, el niño estaba más y más cerca de ver lo que había encima de la mesa, hasta que, por fin, un día lo consiguió. Entonces pensó que su siguiente objetivo sería evitar que la gata le tirara al suelo.
Ya sabía que no eran accidentes y que lo solía tirar cuando él estaba por el medio de la cocina. Así que tenía que vigilar más en esos momentos, porque la gata normalmente le pillaba desprevenido, era una golfilla. Poco a poco empezó a poder rodear la tripa de la gata con las dos manos antes de caerse al suelo.
Era como una lucha de gigantes, una lucha muy divertida con su amiga la gata. Cuando estaban comiendo, el niño le echaba migas o trocitos de pan porque la gata estaba siempre merodeando por las patas de la mesa de la cocina.
Pasaron días y días, semanas y semanas, seguramente meses y meses, aunque el niño no sabía muy bien todavía qué era un mes, hasta que por fin las fuerzas se equilibraron. Durante un periodo de tiempo ni muy largo ni muy corto, cuando se cruzaban el niño y la gata, en el medio de la cocina o en otros sitios de la casa, no sabían si el niño iba a ir a parar al suelo o iba a sujetar a la gata sin caerse.
Al final, la gata empezó a rehuir la lucha, el niño había crecido, estaba orgulloso pero, al mismo tiempo, sabía que siempre echaría de menos el suave roce de la gata derribándole al suelo.
No obstante, de vez en cuando la gata rozaba al niño, pero como muestra de cariño y sin intención de tirarlo.

 
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Kevin  se levanta a las 7:00 y se cambian de ropa.Se lava los dientes y se va a desayunar.Cuando acaba se lleva a su perro a dar una vuelta. Llega a las 8:00 y coge su mochila y se va al instituto.Cuando llega al instituto a las 8:30 va  a su primera clase Ciencias de la naturaleza .Llega a su clase y se sienta en la tercera fila  y cuando llega la profesora saca su libros y su cuaderno.Cuando llega el recreo se va  a la pista de futboll.Cuando toca el timbre va al baño para beber un poco de agua y después va a su clase.Cando son las 2:30 sale del instituto y va a su casa.Cuando llega a su casa saluda a su perro y a su hermano y hace los deberes.Cuando termina los deberes se sirve la comida y come. A las 5:00 lleva a pasear a su perro.Cuando  llega de pasear a su perro merienda un bocadillo de jamón y queso y juega un poco con la consola.
Cuando llega su madre le sirve la cena para ella y para el.Cuando terminan de cenar ven la tele un poco y después se van a dormir.

sábado, 15 de diciembre de 2012

Eres tan ràpido que pareces un guepardo.
Eres tan fuerte que pareces un elefante.
Eres tan bueno jugando al futboll qe pareces C.Ronaldo.
Eres tan listo que parecias un ordenador.
Eres tan adicto que parecias que estabas loco.
 Eres tan feo,pero tan feo que  al nacer dijeron,si no llora es un murciélago.
Eres tan tonto que te hecharon del concurso de subnormales por tonto.
Eres tan gorda,pero tan gorda que cuando nadaba con bañador blanco y negro los de greenpeace tenían que protegerla de los balleneros.
Eres tan lento que te gano hasta una tortuga.
Era un pueblo tan pobre,pero tan pobre que tenia el arco iris blanco y negro.

viernes, 14 de diciembre de 2012

Ola me llamo Kevin y estoi en el instituto voy a segundo de la eso y os contare la vida en el instituto .
Primero el  profe de lengua es bueno pero un poco serio y llo siempre he suspendido  lengua  pero 
este año va a ser diferente me ha dicho qe tengo un aprobado gracias al examen del tema 3 .En ingleS voy bien la profe es mala pero soy uno de los pocos que le cae bien asi que me va bien xd.
El de educacion fisica es el jefe de estudios pero creo que es el mas bueno de los profesores y esta la de sociales siempre que no hacemos los deberes manda una nota a  nuestros padres asi que es un poco mala y se eqivoca se equivoca con mi nombre lla que hay tres Kevin en mi clase .Y el profe de R.lengua que es donde estoi ahora y para aprobar tengo qe hacer esto.